Después de más de dos años en funcionamiento, los desafíos y logros clave del Laboratorio Urbano (LU) TUC establecido en el Barrio 20 en Buenos Aires, Argentina, proporcionan lecciones valiosas para mantener las actividades en curso, acelerar transformaciones más amplias y guiar iniciativas similares en otros lugares:
- INTEGRACIÓN DE LA ACCIÓN CLIMÁTICA CON LOS PROCESOS PARTICIPATIVOS EXISTENTES: El LU Barrio 20 despegó relativamente rápido al capitalizar las estructuras preexistentes y la aceptación política, fomentando la colaboración y manteniendo la flexibilidad, especialmente frente a diferentes perspectivas divergentes. El aprovechamiento del marco de gobernanza participativa establecido en el PIRU facilitó la introducción de una perspectiva climática.
- CAMBIO DE MENTALIDAD Y ENFOQUES EN LA GOBERNANZA: El potencial transformador de la integración de la acción climática y el desarrollo urbano, particularmente en asentamientos informales como Barrio 20, depende de la localización de la agenda climática a la realidad del territorio y la creación conjunta de un entendimiento fundamentado en las prioridades locales. Para cambiar las mentalidades y los enfoques de gobernanza relacionados con el cambio climático es necesario reconocer y tender puentes entre diferentes tipos de conocimientos y experiencias, y fomentar una concienciación sobre los beneficios que resuenan en la comunidad.
- MANTENER Y AMPLIAR LOS PROCESOS Y RESULTADOS TRANSFORMADORES: Los esfuerzos para iniciar, mantener y ampliar la transformación deben reconocer y abordar la naturaleza multifacética y ardua de la participación, además de cultivar nuevas capacidades y liderazgos y promover reformas de políticas con impacto sistémico. Compartir los éxitos dentro y fuera de Barrio 20 es vital, al igual que lo es asegurar una compensación financiera para la comunidad y sortear con los vaivenes administrativos para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de estas iniciativas.