Acción Climática participativa en barrios populares. Barrio 20. © IIED-AL
Nos complace anunciar que el Laboratorio Urbano de Buenos Aires ha sido distinguido con el tercer premio en el prestigioso Concurso de Urbanismo “Vida Urbana”. Este certamen, organizado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) en colaboración con la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), tuvo como objetivo destacar ideas y propuestas innovadoras que promuevan transformaciones urbanas sostenibles, mejorando la calidad de vida, en particular de los grupos más vulnerables.
La propuesta galardonada forma parte de una serie de proyecciones e intervenciones co-construidas por el Laboratorio Urbano en el marco del proyecto de investigación-acción Coaliciones Urbanas Transformadoras (TUC por su sigla en inglés). Este proyecto en 2021 se ha integrado en el proceso de reurbanización en curso del Barrio 20, coordinado desde 2016 por el Instituto de Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires.
Basada en un enfoque de Infraestructura Azul y Verde (IAV), la propuesta tiene como principal objetivo reducir el riesgo de inundaciones y mejorar la calidad del agua pluvial a través de soluciones basadas en la naturaleza. Además, busca mitigar el efecto de isla de calor, capturar CO2, mejorar la calidad del aire, ofrecer nuevas amenidades urbanas, revitalizar el paisaje del Barrio 20 mediante la creación de espacios de encuentro y cuidado, e incrementar la biodiversidad con la plantación de flora nativa, entre otros beneficios. El proyecto también tiene como fin demostrar la complementariedad de la IAV en comparación con la infraestructura gris convencional.
La propuesta presentada toma como punto de partida el proceso de revitalización de la Plaza de las Risas en Barrio 20 iniciado en el marco del proyecto TUC. Sobre esta transformación en curso, se ideó la construcción de dos reservorios de agua a cielo abierto, la incorporación de jardines de lluvia y otros Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDS). Los reservorios, en caso de construirse, tendrían una capacidad de almacenamiento de 780m³ de agua, mientras que los jardines de lluvia absorberían y tratarían 100m³, ayudando a mitigar el riesgo de inundaciones en las viviendas. Estos se complementan con pérgolas vegetadas y la plantación de árboles y arbustos nativos, parte ya realizado en el marco del proyecto TUC, proporcionando sombra y mejorando la calidad del espacio público.
En su conjunto, estas intervenciones proponen sumar 175 árboles, 110 plantas trepadoras, 2430 arbustos, y 1285 m² de superficie verde adicionada y/o revitalizada. Capturan aproximadamente 30ton de CO2 al año.
Con la consigna de imaginar otros futuros urbanos posibles, la propuesta presentada buscó mostrar el potencial de las soluciones basadas en la naturaleza para transformar áreas urbanas vulnerables. Estas intervenciones no solo generarían beneficios ambientales y sociales inmediatos, sino que establecen un modelo replicable para futuras iniciativas de reurbanización en contextos similares.